San Sergio y San Baco: Dos Santos Gays

Anthony Gayton - Sergio y Baco


Anthony Gayton - Sebastian

SAN SERGIO Y SAN BACO

Estos dos santos pertenecientes al interminable panteón de santos reconocidos por la Iglesia Católica presentan una pequeñísima pecularidad: Son dos santos gays, aunque no son los únicos santos homosexuales de la historia de la Humanidad. Recordemos la historia de San Sebastián y de los rumores que circulaban durante los primeros siglos D.C. acerca del supuesto romance que mantenían en secreto Jesús y Pedro. Algunos autores inclusive dicen que Pedro niega tres veces a Jesús porque ellos eran pareja. Además de San Sebastián, San Sergio y San Baco hubieron otros santos que incurrieron en la homosexualidad, como Santo Tomás de Aquino y San Agustín (ambos los teólogos más importantes de la Iglesia). Pero la lista de santos gays es interminable, ya que asumiendo que al menos uno de cada diez hombres es homosexual, la lista de santos homosexuales estaría incompleta. Eso sin contar los que probaron sólo una vez e igual fueron canonizados porque no dejaron pruebas de sus preferencias sexuales.

Ahora les comentaré la historia de estos dos santos, Sergio y Baco, que fueron militares durante los principios del siglo IV, en épocas del emperador Maximiano. Esta pareja fue martirizada porque descubrieron que eran cristianos y murieron humillados, a ambos se les golpeó, torturó, se los vistió de mujer (vestidos de novia), y se los obligó a caminar de la mano en frente de todo el pueblo. Pero recordemos que en esa época la homosexualidad estaba socialmente aceptada, los discriminaron tanto como un castigo de ser cristianos, que ese era el verdadero pecado para el pueblo romano, que castigaba a todos los seguidores de Cristo con la muerte.

Y no sólo que eran homosexuales, sino que aparentemente mantenían una relación que conocían y aceptaban todos los militares, que los respetaban como hombres hechos y derechos. Precisamente el mismo Emperador Maximiano les tenía una gran estima por la valentía militar y la virilidad que ambos demostraban en sus cargos.

Con respecto al puesto que ocupaban en la milicia, Sergio era el “primicerius”. O sea, el jefe-comandante de los gentiles. Y Baco, era un súbdito suyo, desempeñando las funciones de un “secundarius”.

Digamos que Sergio era el que tenía más autoridad de los dos, al menos en cuestiones militares. (No sabemos cuál de los dos santos era Miguel y cuál Cogote, pero apenas lo sepamos editaremos esta entrada para mantenerlos informados, y mientras tanto no borraremos esta leyenda para que liberen su imaginación y así entretenerlos).

Como primer castigo, curiosamente, fueron desnudados y vestidos con ropajes propios de las mujeres. Fueron obligados a desfilar así para ridiculizarlos y luego fueron encadenados. Ellos no se vieron ofendidos por este castigo, sino que fueron cantando durante el camino, dando alabanzas a Dios, como indica la frase siguiente tomada de sus actas martiriales:

“Puesto que las mujeres pueden glorificar a Dios en tales vestimentas, no hay razón alguna para que ellos no pudieran hacerlo” y respondieron al emperador “Como novias nos has vestido con hábitos de mujer, y has hecho bien, pues novias somos, entre nosotros, y de Jesucristo“. (Importantísimas estas declaraciones para su canonización)

La importancia que tienen Sergio y Baco para la comunidad gay de creencia cristiano-ortodoxa es análoga a la de San Sebastián para los gays de creencia cristiano-católica.

Con respecto a su muerte, luego de descubrir que eran cristianos a escondidas, fueron entregados a Antíoco (gobernador de Antioquía) con la orden de que si se negaban a ser persuadidos y seguir en esa “religión profana”, que fueran sometidos al castigo más severo que impone la ley, o sea, el de eliminar en ellos la esperanza de una larga vida con el castigo de la espada.

Obviamente, como es característica de todos los mártires religiosos, se negaron a abandonar su fe en Dios, Baco fue flagelado hasta darle muerte y despedazado. Según dicen las fuentes, los verdugos terminaron agobiados por la resistencia que presentó el joven para abrazar a la muerte.

El Gobernador Antíoco ordenó que no se enterraran sus restos, sino que fueran arrojados y expuestos fuera del campamento, como carne para las bestias, en vez de darles una disposición final más cristiana. Según cuenta la leyenda, las aves impedían que las bestias tocasen los restos.

Sobradas evidencias hay acerca de estos dos santos gays. Creo que con mirar un poco todas las ilustraciones que hay a lo largo del arte de la época bastan. Inclusive, si ustedes tienen dudas de esto, pueden leer la siguiente oración utilizada en la liturgia para realizar el matrimonio homosexual en épocas anteriores a las del catolicismo apostólico romano.

Se cree que Jesús mismo casó a hombres con hombres y mujeres con mujeres, porque en las ilustraciones de la época aparecía el mismo Jesucristo casando a parejas del mismo sexo. Al menos es una teoría. Si alguien tiene más información acerca de esto, por favor dígamelo, mientras tanto les dejo la oración pronunciada durante la ceremonia de los casamientos LGBT:

San Sergio y San Baco

ORACIÓN PRONUNCIADA DURANTE EL MATRIMONIO RELIGIOSO ENTRE DOS PERSONAS DEL MISMO SEXO

“Oh señor Dios y Gobernante que hiciste a la Humanidad a tu imagen y semejanza y le diste el poder de la vida eterna, que aprobaste cuando tus santos apóstoles Felipe y Bartolomé se unieron, juntos no por la ley de la naturaleza, sino por la comunión del Espíritu Santo y que también aprobaste la unión de tus Santos Mártires Sergio y Baco, bendice también a estos servidores “N” y “N”, unidos no por la naturaleza, sino por la fidelidad, permíteles Señor amarse el uno al otro, sin odios y poder continuar juntos sin escándalos todos los días de sus vidas con ayuda de la Santa Madre de Dios y de todos tus Santos porque tuyo es el Poder y el reino, y el poder y la gloria. Padre, Hijo y Espíritu Santo”.

San Sergio y San Baco

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